Caracas.- Solo un certamen le bastó al venezolano Anthony Vizcaya para codearse con los grandes cerradores de las Series del Caribe. Lo sorprendente de todo esto es que no es esta la principal función que el magallanero ha desempeñado en lo extenso de una carrera profesional llena de altibajos, aunque ahora mismo parece haber alcanzado su punto de mayor dominio.

Y es que, al derecho de 29 años de edad, le tocó asumir el rol de manera inesperada como refuerzo de Leones en la edición Gran Caracas 2023 y lo único que ha hecho es rendir dividendos; a tal magnitud, que en los primeros ocho juegos del club en la cita alcanzó cuatro salvamentos en mismo número de oportunidades, para igualar una marca dentro de los anales de la justa, que ostentaban Francisco Buttó en 2009 y el panameño Manny Corpas en 2019.

No son solo los rescates alcanzados por Vizcaya los que se pueden resaltar de su participación como un melenudo. Ha deslumbrado en cada una de sus intervenciones mostrándose hermético después de  que en cinco salidas y 6.1 innings en total, no admitió carrera limpia, recibió solo cuatro imparables, obsequió apenas tres bases por bolas y ponchó a diez, cinco de ellos en un relevo de dos entradas durante el partido contra Dominicana que se dirimió a favor de Venezuela en 12 entradas y tres más en otra faena de un capítulo y un tercio el 9 de febrero contra Colombia, en un careo que le sirvió a su club para alcanzar la final.

“Me he sentido bastante bien en ese rol. Vengo de ser por varias temporadas el setup del Magallanes a pasar a ser un cerrador en una Serie del Caribe que es bastante importante para nosotros los venezolanos que estamos jugando e incluso para los fanáticos. No me he confiado en ningún momento. Sigo trabajando día tras día. Sé que los otros equipos quieren ganarnos, pero yo lo único que hago es batallar para sacar los outs. Muy contento por esta confianza que me brindaron y ahí les estoy demostrando con trabajo”, expresó Vizcaya antes del partido de semifinales contra Colombia.

La escogencia de Anthony Vizcaya como refuerzo para el torneo regional no simplemente se trató de una medida de emergencia para suplir la baja del zuliano Silvino Bracho. Su adición al roster melenudo correspondió a una decisión técnica y gerencial, basada en el análisis de sus loables actuaciones, para que fuese ese hombre importante en los innings finales como efectivamente lo terminó siendo.

“La manera en cómo ha estado lanzando últimamente. Lanzando muchos strikes, que no era esa precisamente su característica principal en lo largo de su carrera, nos llamó la atención y por eso lo trajimos y le dimos el rol de cerrador por encima de otros nombres. Además, que, al igual que lo hizo Silvino Bracho en la final, es un pitcher con la capacidad de darnos varios innings si al final se nos complica el juego”, argumentó José Alguacil sobre las razones que lo llevaron a otorgarle la complicada labor de ponerle el candado a los triunfos.

Para este 2023 Vizcaya obtiene premios a la constancia y al esfuerzo. Durante el Round Robin de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional no hubo lanzador más dominante que él. No es una aseveración hecha a mansalva, no. Así lo reflejaron sus números en dicha etapa con Navegantes, después de que no admitió rayita limpia alguna después de 14.1 episodios y deslumbró al totalizar hasta 20 ponches, sin dejar pasar inadvertido que su WHIP fue apenas de 0.62, tras recibir solo 6 imparables y regalar tres bases por bolas. Ganó un juego y no perdió en 14 presentaciones.

Dicha actuación en la segunda etapa del torneo venezolano cobró mayor relevancia considerando que vino justo después de una ronda regular para el olvido, en la que registró un elevado porcentaje de carreras limpias de 6.99, producto de 22 rayitas legítimas admitidas en 28.1 capítulos de labor. Para su fortuna, ese fue un mal espejismo y para el 2023 realizó los ajustes pertinentes para retomar el sendero de la subyugación sobre los bates rivales.

“Terminé trabajando bastante. Me enfoque en fortalecer la parte física, aunque sobre todo mentalmente. Al principio estaba un poco desconcertado por un tema de índole personal, pero me concentré desde el Round Robin, ya que habíamos clasificado y me puse como meta ayudar a mi equipo a llegar a la final. No se pudo. También me esforcé mucho para tratar de conseguir un buen contrato internacionalmente para el verano”, explicó el diestro integrante del bullpen naviero y uno de los de mejor desempeño durante las últimas campañas.

A pesar de haber tirador “primores” en los playoffs de la LVBP, Vizcaya no fue tomado en cuenta por ninguno de los dos equipos que estuvieron en la Gran Final, quienes se decantaron por reforzar sus respectivas rotaciones abridoras. No se amilanó por ello, continuó trabajando y la invitación para la Serie del Caribe Gran Caracas 2023 llegó y este no la desestimó.

“Gracias a Dios que me tomaron en cuenta para representar a Venezuela. Me siento bien porque lo siento como un premio por todo lo que he estado trabajando”, manifestó el serpentinero larense, que de algún modo ha tenido un resurgir en su carrera, después de que se mantuviera fuera del radar de la liga por un largo trecho, hasta su retorno en la 2019-2020.

Como si lo alcanzado hasta ahora no haya sido suficiente, Vizcaya fue incluido en el roster de la delegación de Venezuela para el Clásico Mundial de Beisbol 2023.